El mejor ataque es una buena defensa, y en este caso nos vale más que nunca
Es una afección que se desarrolla cuando una mujer embarazada tiene factor Rh negativo y el bebé o feto posee factor Rh positivo.
El factor Rh es una proteína que se encuentra en algunos glóbulos rojos. No todos llevamos esta proteína en nuestros glóbulos rojos, pero la mayoría de las personas la llevan. Son Rh positivas. Las personas que no son portadoras de esta proteína son Rh negativas.
¿Cuándo se expone al bebé a riesgos derivados de la incompatibilidad de Rh?
Los anticuerpos Rh serán completamente inofensivos hasta que la mujer se vuelva a quedar embarazada. Si la mujer se vuelve a quedar embarazada de otro bebé Rh-positivo, sus anticuerpos Rh reconocerán las proteínas Rh en la superficie de los glóbulos rojos del bebé como sustancias extrañas.
Los anticuerpos de la madre entrarán en el torrente sanguíneo del bebé y atacarán a las células que contengan proteínas Rh esto puede hacer que los glóbulos rojos del bebé se hinchen y exploten. Esto se conoce como enfermedad hemolítica o enfermedad Rh del recién nacido. Y puede hacer que en el hemograma del bebé salgan muy pocos glóbulos rojos.
¿Cómo se trata la incompatibilidad de Rh?
Si una mujer embarazada tiene la posibilidad de desarrollar una incompatibilidad Rh, los médicos le administrarán dos inyecciones de inmunoglobulina Rh durante el embarazo. Recibirá:
La primera inyección alrededor de la semana 28 de embarazo
La segunda inyección hasta 72 horas despúes de dar a luz .
Una mujer embarazada también puede recibir una dosis de inmunoglobulina Rh si tiene un aborto, se somete a una amniocentesis, o tiene cualquier sangrado o hemorragia.
Si el médico averigua que una mujer ya ha fabricado anticuerpos Rh, observará atentamente su embarazo para asegurarse de que la concentración de estos anticuerpos no es demasiado alta.
En contadas ocasiones, si la incompatibilidad es grave y el bebé está en peligro, el bebé deberá recibir unas transfusiones de sangre especiales llamadas transfusiones de intercambio o exsanguinotransfusiones, sea antes de nacer (transfusiones fetales intrauterinas) o después del parto. Las exsanguinotransfusiones aportan al bebé sangre cuyos glóbulos rojos son Rh negativos. Esto estabiliza su nivel de glóbulos rojos y minimiza el daño causado por los anticuerpos Rh presentes en su torrente sanguíneo.
Fuente: https://es.wikipedia.org/wiki/Incompatibilidad_Rh